En rueda de prensa, la consejera de Agricultura, Ganadería y Pesca, Alicia Vanoostende, ha dicho que este sector "fue esencial" en la economía de las islas durante el confinamiento porque "no paró su actividad" y permitió alimentar a los ciudadanos de las islas pese a los "problemas" que generó el cierre de los canales de hostelería y turismo y las dificultades en exportación.

En total, las pérdidas acumuladas fueron de unos 37 millones, según los informes de la Consejería y aunque no se cubre "el 100%" de las pérdidas sí que es una "ayuda específica" importante que se nutre de 9,6 millones de recursos de Agricultura más otros 12 de Hacienda.

"Hemos ido buscando y rascando fondos desde el verano, es una cuestión justa y necesaria para dar liquidez a un sector que lo ha pasado mal por el covid", ha detallado.

Desglosado por capítulos, el subsector del tomate y pepino capta 5 millones; las hortalizas, 1,7 millones; 7,6 millones para ganadería;1,2 millones para queserías; 1,7 millones, bodegas, y otros 4,3 millones para la pesca.

Vanoostende ha explicado que se han buscado "factores objetivos" para entregar las ayudas, caso de las superficies cultivadas o litros de vino y queso declarados, y para la tramitación se va a contar con el apoyo de la empresa pública GMR.

El objetivo, ha apuntado, es que las concesiones se cierren en diciembre y los pagos se hagan efectivos antes del 15 de enero.

El consejero de Hacienda, Román Rodríguez, ha explicado que la "inmensa mayoría" de estos sectores no pudieron acogerse a las ayudas directas que dio el Gobierno canario porque no cumplían los requisitos por lo que este decreto-ley es una "excelente decisión" para un sector "querido y estratégico".