Esta declaración de proyecto industrial estratégico, impulsada por la Conselleria de Transición Energética, Sectores Productivos y Memoria Democrática, es la segunda que realiza el Govern (la primera fue para el proyecto de Mallorca Green Hysland), ha recibido el visto bueno unánime de los miembros del Consell de la Industria y tiene los informes favorables del Ayuntamiento y del Consell Insular de Menorca, que establecen una serie de condiciones que se tienen que tener en cuenta en la redacción del proyecto de ejecución.

En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consell de Govern, el vicepresidente y conseller, Juan Pedro Yllanes, ha destacado que este segundo proyecto declarado como estratégico es "imprescindible" para cumplir con la hoja de ruta Menorca 2030 para la descarbonización de la isla y permitirá avanzar hacia el cierre de la central térmica de Mahón.

Yllanes ha resaltado que se trata de un "ejemplo pionero" en España que tratará la producción agroenergética, utilizando, entre otros elementos, la sombra que generen estas plantas, precisamente en el actual escenario con la factura de la luz "disparada".

"Paso a paso generamos energía que no solo sirve para abaratar la factura de la luz, sino que también disminuye el impacto al medio ambiente debido a la reducción de emisiones", ha añadido.

La actuación consiste en la instalación de un parque fotovoltaico de 19.999,98 kWp y 15.470 kWn de potencia instalada, tendrá una ocupación de 20 hectáreas y constará de 37.037 paneles solares de 540 Wp de potencia unitaria, seis inversores de 2.570 kVA cada uno, seis centros de transformación y un centro de maniobra y medida (CMM).

Además, la evacuación de la energía generada se hará mediante una línea sepultada de 11.117 metros hasta la subestación de Es Mercadal. El parque, en fase de construcción, podrá llegar a generar hasta veinte puestos de trabajo.

Esta actuación es un proyecto imprescindible para cumplir la hoja de ruta de la Estrategia Menorca 2030 para descarbonizar la isla y llegar, en 2030, al 85 por ciento de energías renovables.

Esta planta fotovoltaica, que fue uno de los proyectos seleccionados por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) para una subvención pública de 2,6 millones de euros, no solo generará energía solar limpia, sino que compartirá esta producción con la agrícola.

En este punto, desde el Govern han señalado que se tiene pensado cultivar lavanda entre las hileras de seguidores, con lo cual se trataría de una planta agrisolar, pionera en España en la producción agroenergética.

La sombra proyectada tiene un efecto positivo en la temperatura del aire, la radiación y las necesidades de agua, puesto que produce temperaturas diurnas más frescas y nocturnas más cálidas, y más humedad que con el cultivo tradicional al aire libre.

El parque está condicionado a la obtención del resto de autorizaciones administrativas, así como al cumplimiento de los condicionantes establecidos en los informes del Consell Insular de Menorca y el Ayuntamiento de Es Mercadal, sin perjuicio de la obtención de la preceptiva declaración de impacto ambiental.

Este proyecto es el segundo que el Consell de Govern declara como estratégico y se suma al proyecto Mallorca Green Hysland, que recibió esta declaración con el objetivo de reindustrializar el área de Lloseta y construir la primera planta de hidrógeno verde del sur de Europa.

Esta instalación, que tiene previsto empezar a producir hidrógeno los próximos meses, recibió una inversión de 50 millones de euros, con una subvención de 10 millones de euros de la Unión Europea.