El Palacio de Justicia ha acogido hoy el acto por el que se declara abierto el año judicial en La Rioja, que ha contado con la presencia de la Sala de Gobierno del Tribunal Superior, la Fiscalía y las primeras autoridades institucionales de la comunidad autónoma.

Entre estas, se encontraban la presidenta del Gobierno riojano, Concha Andreu; el presidente del Parlamento de La Rioja, Jesus María García; y el alcalde de Logroño, Pablo Hermoso de Mendoza.

Debido al actual estado de la pandemia por la COVID 19, el solemne acto judicial se ha celebrado con las restricciones de aforo que recomiendan las autoridades sanitarias con el fin de garantizar la salud y seguridad de todos.

Los Jueces, Fiscales y Letrados de la Administración de Justicia que no han asistido a la Apertura de Tribunales han podido seguir el desarrollo del acto por streaming.

Recordando a Murakami, Marca ha creído que tras la tormenta pasada, en este caso la pandemia, la justicia riojana "no será la misma". Su transformación, ha relatado, ha incluído, "la celebración de vistas judiciales en formato virtual, el expediente judicial electrónico, la cita previa, el teletrabajo y las medidas de seguridad e higiene van a redundar en una mayor modernización y eficacia de nuestra Administración de Justicia".

Marca ha hecho hincapié en que "los ciudadanos tienen derecho a obtener una respuesta judicial en un plazo razonable y sin dilaciones indebidas, porque la Justicia tardía no es Justicia".

Por ello solicita la creación de cuatro nuevas plazas judiciales: el sexto magistrado en la Audiencia Provincial, el tercer magistrado en las Salas de lo Contencioso Administrativo y Social del TSJR y el octavo Juzgado de Primera Instancia en Logroño.

También pide un salón de actos para actos institucionales; una sala con un aforo mayor para juicios mediáticos o con jurado; y una reforma integral de los juzgados de Haro y Calahorra.

Marca ha detallado cómo La Rioja tiene una de las tasas de criminalidad más bajas, de 24 por cada mil habitantes (cuando la media nacional es de 37). Y ha destacado el volumen de casos resueltos (24.800 de los 25.700 que entraron).

Por su parte, el fiscal superior de La Rioja, Enrique Stern, ha destacado que en 2020 las denuncias por agresiones sexuales descendieron un veinte por ciento, y las denuncias por abusos sexuales un 32. No hubo ninguna denuncia por violación.

Se denunciaron cuatro asesinatos y cuatro homicidios, aunque ha apuntado que en algunos casos se denunció imprudencia por falta de atención en la pandemia.

También descendieron los delitos por tráfico de drogas un 45 por ciento y los delitos contra el patrimonio bajaron un seis por ciento, aunque las estafas se incrementaron en un cinco por ciento por las compras por Internet.

Se trata de una forma de estafa, ha dicho, que es difícil de investigar y, en caso de juicio positivo para la víctima, es difícil la recuperación del dinero.

Stern ha pedido más fiscales y más medios materiales, sobre todo tras la reforma sobre la personas con discapacidad. La nueva ley obliga a examinar de manera individualizada los límites concretos que tiene cada persona que se vea implicada en un procedimiento de incapacidad, lo que requiere un trabajo adicional que con la plantilla actual es difícil de acometer.