Hilary Duff no puede estar más feliz con la llegada al mundo de su tercer bebé, segundo fruto de su relación con el músico Matthew Koma (el primero, Luca Cruz, nacido en 2012, lo tuvo con el jugador de hockey Mike Comrie), y no cesa de mostrar dicha alegría en sus redes sociales, con especial hincapié en su Instagram, donde tiene casi 18 millones de seguidores.
La cantante y actriz de 33 años (aunque hace tiempo que se decantó por su faceta de empresaria) organizó este fin de semana una quedada con varias amigas celebrities para que llevasen a sus recién nacidos a su casa y allí montar una pequeña clase de música para bebés.
A su residencia en Los Ángeles acudieron otros antiguos ídolos adolescentes de principios del milenio, como Mandy Moore o Ashley Tisdale, con sus pequeños Gus y Jupiter, de cinco y cuatro meses, respectivamente, así como la cantante Meghan Trainor, que llevó, claro, a su hijo Riley, nacido a comienzos de años.
Además, la fiesta, tal y como se pudo comprobar por las stories que compartió la protagonista de Lizzie McGuire, también contó con la presencia de la bloguera experta en alimentación saludable Gaby Dalkin y Poppy, su hija de seis meses, y la maquilladora Kelsey Deenihan Fisher, con su bebé de cuatro.
Los seis recién nacidos, en corro, fueron los asistentes a esa musicoterapia para pequeños que impartió la artista texana con instrumentos no muy ruidosos, como se pudo comprobar por una de las imágenes que más tarde reposteó Mandy Moore y en la que agradeció a la anfitriona su curso para los más pequeños.
"¡Clase de música! Gracias por darnos una razón para reunirnos", comentó la cantante, así como otras de las presentes también sucumbieron a la tentación de compartirlo, como la estrella de High School Musical, que aseguró entre bromas que su bebé tiene un lado de la cara más pesado (y por eso aparece con la cara torcida).
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