El director de programas de la ONU para el Milenio dice que Bush es un ignorante

Jeffrey Sachs sostiene que la Casa Blanca no cree que la lucha contra la pobreza tenga sentido, y que "ha intentado de una manera muy agresiva impedir un buen resultado en la cumbre de Nueva York".
El director de los programas de la ONU para el Milenio, Jeffrey
Sachs, ha criticado la "ignorancia" del presidente estadounidense, George W. Bush, y la forma en que Estados Unidos intentó impedir que la cumbre de Nueva York aportase resultados.

"El Gobierno de EEUU ha intentado de una manera muy agresiva impedir un buen resultado en la cumbre", denunció Sachs en una entrevista que publica hoy el diario Die Tageszeitung.

La falta de resultados fue notoria en la lucha contra la pobreza pues "EEUU cree que esa lucha no tiene sentido y que, por tanto, no debe formar necesariamente parte de la estrategia de futuro", según Sachs, para quien ese argumento denota la "ignorancia" que anida en la Casa Blanca.

"De los 120.000 millones de dólares que ingresa anualmente EEUU sólo 3.000 millones se destinan a Africa", destacó, al asegurar que EEUU "tiene miedo de los pobres". No obstante, dijo, la meta de reducir la pobreza extrema y el hambre que hay en el mundo a la mitad de aquí al 2025 se mantiene en la agenda internacional.

Recordó, en ese contexto, que la idea de que Estados Unidos es el país que marque los tiempos pertenece al pasado, pues cada vez hay más países dispuestos a no esperar, a seguir su propia agenda. Citó como ejemplo el Protocolo de Kioto para la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, que ya ha sido ratificado a pesar de que Washington se resiste a firmarlo.

Además, el dinero de EEUU no es el único que circula en el mundo y casi el 95%de la población mundial no vive en EEUU, según Sachs. "Esta Administración vive en el error de que todos los tratados internacionales impiden a las superpotencias hacer lo que deben hacer. "¡Que dramático malentendido!", declaró.

En su opinión, "EEUU no tuvo la fuerza de imponer su voluntad un par de kilómetros más allá de Bagdad. EEUU necesita socios globales, pero eso es algo que los neoconservadores no quieren entender".

Para Sachs, "los países pobres hicieron a los ricos una oferta, que también les comprometía a ellos a posibilitar los objetivos del Milenio. Nunca les pidieron la mitad de sus ingresos o llamaron a una revolución global para modificar las estructuras económicas. Se contentan con el 0,7% del PIB". "Si fuera un neoconservador saltaría en el aire de alegría, por haber logrado mantener mi orden mundial por un precio tan barato", añadió.

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