En una nota de prensa, Taboada ha recordado que este equipamiento público "vive un estado de abandono evidente", y ha pedido la reparación urgente de goteras y conocer qué ha pasado con el antiguo proyector que estaba en el Teatro Filarmónica, al igual que el equipo de sonido, por si ambos han sido trasladados al de Pumarín.

Por otro lado, ha reclamado alternativas sociales públicas en el barrio. "El vecindario de Pumarín nos traslada su malestar una vez que no pueden disponer de los centros sociales del barrio ni de la biblioteca", ha criticado.

La concejala afirma que habiendo espacios y horas libres para el uso del teatro, "resultaría muy positivo abrirlo a su uso a los colectivos del barrio que necesitan de estos espacios para poder reunirse, garantizando el aforo y los protocolos covid al respecto".