Los barrios periféricos de Córdoba han aumentado su población de forma considerable en los últimos años. En 2001 eran 20.671 los cordobeses que vivían en estas zonas de la ciudad.

Ahora lo hacen 29.162 personas, un 41% más, según el último padrón municipal. Las principales quejas de los vecinos de estas zonas, ante el aumento de la población, hacen referencia a la deficiencias en los servicios, principalmente en los de limpieza, educativos, vigilancia o la atención sanitaria.

El presidente de la Asociación de Vecinos (AVV) Luis de Góngora de Trassierra, Rafael Valenzuela, resalta la necesidad de «una mayor limpieza de la zona» y de un mayor número de contenedores, principalmente «ahora que aumenta la población con el verano». En cuanto a la vigilancia de la zona, Valenzuela indica que «sólo disponemos de un agente de lunes a viernes» por las mañanas.

Por su parte, la tesorera de la AVV Fraternidad de Alcolea, Ana Gómez, indica que la presencia de policía en la barriada «es muy escasa por el día y nula por la noche».

Tampoco hay presencia policial, según Gómez, para la regulación del tráfico, especialmente a la hora de la salida de los niños del colegio. En lo relativo a la limpieza, asegura que «tenemos problemas con Sadeco», porque no vienen lo suficiente, a su juicio. Considera que Alcolea «está sucia y dejada», principalmente después de los fines de semana debido al botellón de los jóvenes.

También los centros educativos son objeto de queja. En los últimos años no se ha creado ningún nuevo colegio en Alcolea. Tan Sólo se ha abierto, según Gómez, una guardería. Por otra parte, la profesora del IES Villarrubia Carolina Morilla asegura que «es necesario ampliar el centro educativo». Asimismo, Morilla considera que el colegio Azahara «está masificado», ya que en los últimos años la barriada «se ha convertido en una ciudad dormitorio».

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