Cómo hacer el cambio de armario para verano optimizando el espacio al máximo

Procura guardar siempre la ropa en el armario y evita que se acumule encima de la silla o en cualquier otro punto de la habitación. El desorden no te ayudará a descansar y si la ropa está sucia puede hacer menos agradable la estancia.
Montón de ropa para guardar en el armario.
Pixabay/Myriams-Fotos
Procura guardar siempre la ropa en el armario y evita que se acumule encima de la silla o en cualquier otro punto de la habitación. El desorden no te ayudará a descansar y si la ropa está sucia puede hacer menos agradable la estancia.

Con la llegada de las buenas temperaturas, comienza la época del año en la que hay que hacer cambio de ropa en el armario para sacar la ropa de verano y guardar la de invierno, un trabajo que a veces puede resultar difícil por falta de espacio.

Sin embargo, existen algunos trucos para conseguir hacer esta tarea mucho más sencilla, ahorrando espacio en el armario y ordenando la ropa, zapatos y accesorios de forma fácil.

¿Cómo ordenar la ropa en el armario?

En primer lugar, hay que tener en cuenta que la ropa que más se usa a diario hay que ponerla más a mano, relegando otras prendas a segundo plano. Así, la ropa de invierno, como jerséis y sudaderas, hay que guardarla en bolsas grandes de almacenamiento o cajas y ponerla en el altillo del armario u otro lugar donde no moleste en esta época de verano. 

Antes de hacer eso, se puede hacer limpieza de ropa y quitar todas aquellas prendas que ya estén viejas o no se usen, para así ahorrar espacio. En esas mismas bolsas de almacenamiento se pueden guardar los edredones y mantas que tampoco se van a usar más. 

Una vez esté vacío el armario de la ropa de invierno, se puede aprovechar para limpiar en profundidad todas las estanterías antes de meter la ropa de verano, eliminando el polvo que se pueda haber acumulado. 

Después, se puede extender toda la ropa de verano y ordenarla por prendas para ver qué es lo que se tiene y, en caso de que sea necesario, tirar las prendas viejas o que ya no se utilicen para dejar más espacio al resto de ropa. 

Por otro lado, los abrigos, chaquetas y otras prendas de gran tamaño se pueden guardar en  fundas con cremallera y dejarlas colgadas en el mismo armario, de tal modo que pasan a un segundo plano y quedan bien protegidas sin necesidad de meterlas en el altillo del armario, donde puede no haber espacio suficiente.

Una vez hecho todo esto, se puede pasar a colocar la ropa de verano. Las perchas con pinzas son muy efectivas para ahorrar espacio y colgar tanto los pantalones cortos como las faldas, mientras que los vestidos, camisas, polos o camisetas se pueden colgar en una percha fina normal. Colgar la ropa es lo más recomendable para ahorrar espacio y evitar que se arrugue. 

Por otro lado, los zapatos se pueden guardar en el mismo armario o tener un pequeño armario zapatero donde entran sin problema las sandalias, zapatillas y el resto de calzado veraniego. 

Además, si dentro del armario hay otros apartados o baldas, se pueden usar para los cinturones, ropa interior, bikinis y bañadores, toallas de la piscina... o se pueden hacer apartados usando las típicas cajas de tela, que se pueden encontrar en diferentes tamaños y sirven para organizar todos los accesorios.

Entre otros trucos para ahorrar espacio, se puede adquirir una segunda barra para colgar, que son muy fáciles de instalar y se podrá poner en ella más ropa estirada. También se puede usar una misma percha para varias prendas o comprar las perchas múltiples, que traen varias pinzas en un mismo soporte.

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