Tráfico empezará a sancionar a partir del próximo 1 de junio a los automovilistas que no respeten las limitaciones del sistema de velocidad variable que está actualmente en pruebas en algunos de los accesos de Barcelona.

El Servicio Catalán de Tráfico (SCT) ha informado de esta fecha, después de que se hubiera prorrogado la puesta en marcha del período de sanciones por la necesidad de realizar algunos ajustes entre el sistema de velocidad variable y el procedimiento sancionador.

Las vías en las que se aplica la velocidad variable son la autovía de Castelldefels (C-31) y la autopista del Garraf (C-32), que disponen de paneles luminosos cada kilómetro que indican la velocidad a la que se puede circular en función de las condiciones de congestión, seguridad viaria e inclemencias meteorológicas.

A los conductores que sobrepasen los límites que se establezcan en las señales se les sancionará en aplicación de la normativa vigente de infracciones y sanciones por exceso de velocidad, según ha recordado Tráfico.

La velocidad variable, un modelo pionero en España para combatir la congestión y la contaminación, se aplica en 19,4 kilómetros de la C-31 y en 14,3 de la C-32, donde desde el 15 de enero se limita la velocidad entre los 80 y los 40 kilómetros por hora en virtud de las congestiones, los accidentes, la contaminación o el clima.