Como concepto, lo de comida rápida no tiene muy buena fama, es verdad. Pero más allá de las archiconocidas opciones de las cadenas de turno, hay propuestas muy sabrosas que pueden presumir de ser bastante económicas y pensadas para una comida informal y tan rápida como queramos.
Si además sumamos a esta ecuación un menú con platos algo diferentes tenemos una combinación ganadora. ¿Y dónde podemos encontrar algo así en Barcelona? En muchos sitios, pero estos son cinco opciones que hemos podido probar recientemente y que nos han gustado.
Sushi not sorry
El nombre es toda una declaración de intenciones de este servicio de comida a domicilio no apto para puristas de la gastronomía japonesa. Una singular combinación de clásicos de la comida rápida (hamburguesa, perrito caliente, donuts...) pero con un toque nipón muy original y divertido.
Aquí no hay mamis, sushis o sashimis canónicos. Ni mucho menos. La carta se despacha con ideas como las sushi-croquetas (curiosas y contundentes) o la sushi-hamburguesa (con atún, queso crema, masago, aguacate y unos noodles de ramen ejerciendo de pan).
Son sólo dos ejemplos del juego que se gastan por aquí. Una de esas maravillosas guarrindongadas perfectas para pasar un rato divertido en la mesa y sorprender a quien crea haberlo visto todo.
Sushi not sorry sólo ofrece servicio a domicilio y el precio medio está por debajo de los 15 euros.
Lucky Road
En estos tiempos en los que viajar está complicado, siempre nos quedarán los restaurantes como una forma de asomarnos a esos destinos exóticos que hace tiempo que no pisamos.
La breve pero animada carta de Lucky Road nos traslada al sudeste asiático, con una combinación de platos de Corea (bibibamp o unas picantes y sabrosas alitas de pollo), Thailandia (muy sabroso el pad Thai) o Vietnam, con su sopa pho bo.
Ojo también a su pato Pekin para los que quieran probar este señorial plato chino en una versión más callejera. Todo ello aderezado con una buena oferta de cervezas de importación de la zona lo que, unido a la decoración del lugar, nos hará soñar por un momento que hemos volado muy lejos.
Merece la pena pasarse por su local en el barrio gótico, pero también tienen servicio a domicilio. Todo en raciones generosas y por menos de 20 euros por persona.
La Real
Vale, una hamburguesa no es lo que llamaríamos un plato diferente si hablamos de comida rápida. Pero lo cierto es que en La Real no sólo apuestan por una carta de hamburguesas con algún que otro toque diferente (con queso raclette o con guindillas, por poner un par de ejemplos) sino que también incluyen alguna opción curiosa.
De hecho, no podemos irnos de aquí sin probar uno de sus platos estrella: la cebolla frita. Se sirve entera y abierta con un toque de lima que le siente muy bien, y mahonesa con kimchi para ir mojando.
Un buen entrante antes de hincarle el diente a una de sus hamburguesas con carne de piraña. Y de acompañamiento patatas con crema de pareas y trufa. Un día es un día y de aquí sales con una enorme sonrisa por menos de 15 euros.
Hula Poke Food
Si pensabas que la moda del poke había pasado, nada de eso. Con la llegada de la primavera vuelve a apetecer más que nunca este plato único en versión hawaiana.
Con base de arroz o quinoa normalmente, vegetales, atún o salmón y alguna salsa que anime un poco el conjunto -ojo con la cantidad, que esto no es una sopa- en Hula Poke Food han tenido una idea para que los indecisos no sufran: su Caja JA JA JA. Sí, se llama asi.
Se trata de un pack con cuatro pokes de tamaño mediano, perfectos para compartir entre dos o tres personas y probar un poco de todo. Se puede elegir entre salmón, salmón teriyaki, atún, atún picante, pollo, roast beef y tofu (el atún picante y el salmón teriyaki están muy ricos) y el precio es de menos de 25 euros, con un ticket medio que anda sobre los 12 por persona.
Tienen locales en Urquinaona, Sagrada Familia y Les Corts -consulta horarios y aperturas antes- y también servicio a domicilio.
Honest Greens
Ya hablamos hace tiempo de Honest Greens aprovechando su doble apertura en El Born y la calle Tuset a principios de año. Pero no podía faltar en una lista en la que se habla de comida rápida interesante y con precios ajustados.
Aquí la apuesta es eminentemente vegetal, aunque es verdad que no falta la carne o el pescado para quien quiera elegir esta proteína como base de su plato, al que ir sumando más ingredientes y acompañamientos.
Recetas muy sabrosos y coloridas con un toque de brasa en muchos casos son el eje central de la carta de Honest Greens, ese lugar al que llevar a quien diga que las verduras son aburridas.
El ticket medio no suele pasar de los 20 euros, aunque el buen café que sirven y sus estupendas tartas a veces estiran un poco la cuenta, claro.
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