El sector hotelero de Barcelona ha dejado de ingresar 2.100 millones de euros desde el inicio de la pandemia, lo que equivale a un 95% de la facturación habitual. Actualmente, solo un 30% de los hoteles están abiertos, con caídas de precios de entre el 50% y el 60%, y un 90% de los trabajadores del sector continúan afectados por un ERTE. "Vivimos principalmente de un turismo internacional que no puede llegar y, por lo tanto, no podemos trabajar", ha lamentado el presidente del Gremio de Hoteles de Barcelona, Jordi Mestre. 

La entidad ha alertado de una situación "dramática" y ha reclamado acelerar la vacunación ante un número de reservas "muy escaso", tanto de cara al Mobile World Congress (MWC) como para el verano.

Para hacer frente a la situación actual, el Gremio de Hoteles ha destacado la importancia de factores "clave" como la aceleración de la vacunación, la difusión de Barcelona como un destino seguro y la reactivación de ferias y congresos.

En este sentido, Mestre ha defendido la ampliación del recinto de Fira de Barcelona y ha asegurado que la institución es "capital" para la recuperación del sector. Asimismo, ha defendido la ampliación del Aeropuerto de Barcelona – El Prat, que tiene que permitir "una mejora importantísima de las conexiones".

El Gremio de Hoteles ha asegurado que la situación del sector continúa siendo "dramática". Actualmente solo hay 131 hoteles abiertos en la ciudad de Barcelona, un 30% del total, con ocupaciones "bajísimas" de entre un 10% y un 15%. Antes de la pandemia, a finales de abril había cerca de 60.000 personas durmiendo en la capital catalana, una cifra que se sitúa actualmente alrededor de 2.000 pernoctaciones.

Los cinco primeros meses de este año han sido "perdidos" y el Gremio de Hoteles asegura que el verano "no pinta nada bien", sin movilidad y con un porcentaje bajo de personas vacunadas. "Vivir un verano como el año pasado sería un desastre con consecuencias nefastas para el sector", ha advertido Mestre.

El presidente del Gremio de Hoteles ha situado el verano como "la última oportunidad" del sector hotelero para "remontar", a pesar de que ha reconocido que, por ahora, las previsiones son "muy complicadas". De hecho, las reservas para este periodo son "escasas" y comportan también mucha inseguridad por la flexibilidad de las cancelaciones.

En todo caso, el Gremio de Hoteles prevé que el número de hoteles abiertos pueda aumentar hasta el 50% en verano. Algunos establecimientos prevén abrir directamente en 2022, a pesar de que la entidad asegura que se trata de una cifra residual.

Otra de las fechas marcadas en el calendario del sector hotelero es la celebración del Mobile World Congress (MWC). Por ahora, el Gremio de Hoteles no dispone de datos sobre el número de reservas y prevé empezar a tener una idea del volumen de clientes a partir de la primera semana de junio, con "mucha menos antelación" que habitualmente.

Defienden el museo Hermitage

Mestre ha avisado de que un bloqueo por parte del Ayuntamiento al proyecto del Museo Hermitage puede hacer que otra ciudad "se lo lleve", y ha defendido que apostar por un turismo de calidad debe ir acompañado de infraestructuras de calidad.

Ha añadido que el museo podría atraer al turismo de Barcelona, como ocurrió con el Museo Guggenheim para Bilbao, y que "bienvenido sea" siempre que cumpla todas las normativas.

También ha opinado el director general del Gremi d'Hotels de Barcelona, Manel Casals: "Las dos partes deben ser flexibles" para que se quede en Barcelona y encontrar una ubicación que convenga a todos, ha dicho.