José padece leucemia. Debe permanecer en casa sin ir al colegio, pero no tiene por qué perder el curso. 400 voluntarios, licenciados en diversas materias (estudiantes de último curso, profesores en activo o jubilados), se encargan en Andalucía de la educación de niños como él, gracias a un convenio entre Save the Children y la Junta, renovado cada año, explican fuentes de Educación a 20 minutos.

En 2008 fueron 161 los menores (de 6 a 16 años) atendidos con este Programa de Atención Educativa Domiciliaria. Desde su puesta en marcha, más de 1.600.

Los menores padecen enfermedades de larga duración, como cáncer, fibrosis quística o cardiopatías, o han sido trasplantados.

Son sus padres o sus colegios los que alertan de su situación a Educación, que pasa el caso a la organización. La llegada del profesor a su domicilio ocurre en pocos días. Desde ahí y hasta su recuperación o alta médica, lo visitará al menos cuatro horas semanales. El docente está en permanente contacto con su colegio o instituto.

Es a principios de curso o tras Navidad cuando más partes llegan a Save the Children.

Si desea ser voluntario, infórmese en el 954 21 96 43 o por e-mail en andalucia.occidental@savethechildren.es

Cinco preguntas a... Rafael Serrano. Profesor voluntario

1¿Cuánto lleva colaborando en el programa? Cinco cursos. Al ser profesor, la información sobre el programa llega a los centros.

2¿A qué alumnos ha atendido? A estudiantes de quinto y sexto de Primaria. En cada curso he trabajado con un solo alumno. La última padecía leucemia.

3Exactamente, ¿en qué consiste su labor? En que no pierdan el curso y en retomar la función del centro en sus domicilios. Les impartimos todas las asignaturas, les examinamos e, incluso, les evaluamos.

4La mayor dificultad radica en... Lo que nos encontramos: la enfermedad. Además de ser docentes, hacemos compañía, labores para mejorar la autoestima...

5¿Por qué colabora en este programa? Mi motivación la enlazo con mi educación: preocupación por los demás.