Obama sella el compromiso aliado de ayudar con 5.000 nuevos soldados en Afganistán

Los Obama y los Sarkozy, en Estrasburgo.
Los Obama y los Sarkozy, en Estrasburgo.
Jim Young/REUTERS
Los Obama y los Sarkozy, en Estrasburgo.

El presidente de EEUU, Barack Obama, afirmó este sábado que "hoy hemos empezado a armonizar los recursos con las necesidades" en Afganistán, después de que los aliados hayan ofrecido cerca de 5.000 soldados extra.

Obama dio  una rueda de prensa al término de la cumbre de la OTAN celebrada en Estrasburgo (Francia) y Kehl (Alemania) para celebrar su 60 aniversario, en la que presentó su nueva estrategia para Afganistán y pidió a los aliados un mayor esfuerzo en ese país.

Según declaró el presidente estadounidense, "durante demasiado tiempo nuestros esfuerzos en Afganistán carecieron de los recursos necesarios para lograr nuestras metas" en ese país. EEUU, recordó, ya ha tomado medidas para reforzarse y enviará cerca de 21.000 soldados más además de los 36.000 que ya mantiene pero "EEUU no puede hacer frente a este desafío sola".

Obama se declaró "complacido" por las ofertas de los aliados, que según desglosó incluye el envío de 3.000 soldados para apuntalar la seguridad de cara a las elecciones del próximo 20 de agosto en Afganistán. Además, indicó, también se enviarán 300 efectivos para ayudar al adiestramiento de las fuerzas afganas.

Los aliados han prometido además un fondo de 100 millones de dólares, de los que 57 procederán de Alemania, para costear las tareas de formación de estas fuerzas.

"Esta no era una conferencia de donantes, y sin embargo recibimos el tipo de compromiso que históricamente no se recibe en conferencias como ésta", señaló Obama, quien insistió en que el número comprometido es "significante". Según opinó, parte del éxito obtenido a la hora de lograr el compromiso de los aliados se debe a que "no tratamos de pasar por encima de las dificultades" que atañe la misión.

En este sentido, reconoció que el envío de más efectivos a Afganistán "representa un esfuerzo de la población en unos momentos muy difíciles" debido a la crisis económica que vive el mundo. Acerca de la ley islámica implantada en Afganistán, el presidente de EEUU afirmó que "nos oponemos a esta ley, pero en lo que nos centramos es en derrotar a la red terrorista Al Qaeda y asegurarnos de que se queda sin santuarios desde donde lanzar ataques contra los estadounidenses".

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