Así, según han informado fuentes de la Concejalía de Medio Ambiente a 20 minutos, «a estas fallas se les va a repartir dos tipos de bolsas. Una para que tiren los desperdicios de papel y cartón y la otra para los envases».

De esta forma, los técnicos del servicio de limpieza pasarán a diario por los casales para retirar las bolsas usadas y ofrecer nuevas.

Con esta inciativa también se pretende ofrecer una alternativa de reciclaje, ya que muchos de los contenedores de estos barrios se tienen que retirar o cambiar de ubicación para posibilitar su limpieza.

Si no se hiciera, muchos se quedarían sin vaciar puesto que por los cortes de calles quedan en puntos totalmente inaccesibles para los camiones de recogida. En total, son alrededor de 900 los contendores que cada año se cambian de sitio o se retiran por estos motivos. Otros se cambian por unos cubos de menor tamaño que se retiran con camiones más pequeños.

Sin embargo, según las mismas fuentes, «cuando se traslada un contenedor se deja una nota de aviso en los patios cercanos informando de las nuevas ubicaciones».

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