La falta de músicos 'desafina' la Banda Sinfónica Municipal de Madrid

La Banda Sinfónica Municipal, con pegatinas de protesta durante un concierto.
La Banda Sinfónica Municipal, con pegatinas de protesta durante un concierto.
BSM
La Banda Sinfónica Municipal, con pegatinas de protesta durante un concierto.

Si el compositor Isaac Albéniz levantara la cabeza y viera el estado de la Banda Sinfónica Municipal de Madrid, seguramente le daría un tirón de orejas a su sobrino-nieto, el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón. Y es que la orquesta lleva una década bajo mínimos, sin músicos suficientes para todos los instrumentos.

"La banda necesita 90 personas, pero ahora mismo hay 23 plazas sin cubrir con personas fijas", explica el portavoz de la agrupación, Enrique de Tena. Desde 1997, muchos miembros de la banda se han jubilado y otros la han abandonado, pero el Ayuntamiento aún no ha convocado oposiciones para sustituirlos.

Para actuar, el director de orquesta tiene que buscar un violonchelista alternativo un día, un trompetista al siguiente y rezar para que el público no note que faltan dos saxofonistas y algún violinista. "Tenemos que hacer un gran esfuerzo para que el público no note la bajada de calidad", lamenta De Tena. Cuando llega un concierto importante, la banda tiene que contratar a músicos de forma puntual. Ensayan unas semanas, tocan junto al equipo y se van.

Este año es el centenario

Todo ello pese a la reconocida melomanía de Gallardón y al centenario de la banda (la primera actuación fue el 2 de junio de 1909). "Atraviesa su peor momento, jamás había estado así en 100 años", aseguran sus miembros. Y lo peor está por llegar. De aquí a cuatro años, se jubilarán otros 20 músicos. Si no se cubren sus vacantes, la orquesta quedará con la mitad de la plantilla.

Tenemos que hacer un gran esfuerzo para que el público no note la bajada de calidad

La Concejalía de Las Artes reconoce que la falta de músicos es "un problema que se viene arrastrando muchos años; convocar esas oposiciones es un proceso largo y difícil". Mientras, ha abierto una bolsa de trabajo "de la que se tira cuando falta gente".

A los músicos sólo les queda recurrir al pataleo. Este martes, en un concierto en el Teatro Real exhibieron una pancarta, recogieron firmas y se colocaron pegatinas en la solapa. Precisamente, tocaron partituras de Albéniz, el tío-abuelo del alcalde: "Al maestro nunca se le habría ocurrido abandonar a la orquesta".

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