Así lo ha señalado en nota de prensa CCOO, tras la reunión mantenida en este día con la Dirección de la multinacional siderúrgica.

En la misma han señalado que la puesta en marcha se hará sin estar terminado el filtro de mangas y con limitaciones de producción debido a las emisiones medioambientales permitida la modificación de la autorización ambiental integrada regional, para poder llevar a cabo el citado arranque.

Asimismo, según la comunicación hecha por la empresa a los sindicatos, una vez en marcha el Sínter A y durante el primer semestre del año, se llevará a cabo la parada programada anual del Sínter B para poder ponerlo al día, ya que para entonces llevará ya un año en funcionamiento sin apenas paradas para poder reparar, según CCOO.

Ante esta situación, desde CCOO se ha dado la voz de alarma sobre el estado de la plantilla, al opinar que no es suficiente para llevar a cabo el arranque "con tanta premura", al ser preciso una formación previa en materia de seguridad y de operativa en el Sínter.

Respecto a los ajustes de personal, han avanzado que se convocará para el próximo 5 de enero una asamblea general de afiliados donde se detallará la propuesta final de la empresa.