Los ovetenses soportan a diario 54 decibelios de media cuando lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) es 51 (50 decibelios hace una máquina de escribir la teclearla de forma mecánica).

La estación que peores datos registra es la ubicada junto al Palacio de los Deportes, que llega a registrar una media de «entre 73 y 74 decibelios» diarios, según denunció ayer la Coordinadora Ecoloxista d' Asturies y la Asociación de Juristas. De hecho, es la zona más ruidosa de toda la región y se debe a la proximidad con la A-66 (pasan a diario 50.000 vehículos).

La plaza de Toros, también mal

La estación ubicada en la plaza de Toros también aporta datos altos en cuanto a la contaminación acústica. El peor día fue el 28 de octubre, cuando se registraron 72 decibelios. Ese día también fue el más ruidoso en la estación de Trubia, aunque los decibelios aquí fueron sensiblemente inferiores, 53.

Los ecologistas denuncian que estos últimos datos «no son representativos debido a la ubicación de la estación en la salida a Grado», como tampoco lo son los que mide la estación de Purificación Tomás. En una zona «donde no vive nadie», se llegaron a registrar 44 decibelios el 2 de julio. Por lo que concluyen que la contaminación acústica de la ciudad es superior a la media que aportan estos números.

Exigen medidas

Exigieron al Ayuntamiento que tome medidas para reducir el ruido como fomentar el transporte público, peatonalizar la zonas de mayor tráfico y concentrarlo en zonas «no muy humanizadas».

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