La innovación médica y científica y la creciente coincienciación ciudadana están reduciendo cada vez más las demoras en los trasplantes de órganos. La lista de espera para lograr un órgano se ha reducido un 36% en un solo año en Aragón.

En la actualidad hay en la comunidad 59 enfermos a la espera de un órgano, cuando hace un año eran 93. Los enfermos de riñón son los que más han reducido su espera e incluso el 25% de ellos pasan por quirófano en la primera semana de estar en lista de espera, según explicó a 20 minutos el coordinador de trasplantes de Aragón, José Ignacio Sánchez Miret.

Ahora hay cincuenta aragoneses esperando un riñón, el número más bajo desde que se llevan a cabo estas intervenciones. Hace un año eran ochenta en total. El impulso de la donación de riñón de una persona viva al enfermo, entre otras técnicas, es una de las técnicas que más está favoreciendo el que se reduzcan las esperas.

En cuanto al resto de trasplantes, en estos momentos sólo hay una persona en lista de espera para recibir un nuevo corazón, mientras que a finales de 2007 estaban en la misma situación cinco pacientes. Por otro lado, hay ocho enfermos que requieren un hígado nuevo. En este caso, es el mismo número que hace un año.

El número de trasplantes realizados en 2008, noventa en total, equivalen a una ganancia de vida total igual a mil años; es decir, cada enfermo ha alargado su esperanza de vida de forma drástica.

Aragón no sólo está a la cabeza de las comunidades que más trasplantes realiza, sino que es de las que más órganos da a otras comunidades. Durante 2008, se exportaron 68 órganos, pero también se recibieron otros 21 de distintas zonas de España por su compatibilidad.

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