Después de cuatro meses de obras, el Concello inauguró el pasado 23 de diciembre la humanización de las calles que rodean a Povisa. Aceras de piedra, más anchas, en las que los peatones ganan espacio son ahora las protagonistas.

Sin embargo, los conductores lo tienen complicado. En las calles Zamora, Barcelona y Salamanca todavía no se han colocado las señales que delimitan, por ejemplo, las plazas de aparcamiento. La consecuencia más grave de esta falta de señalización la padecen en el propio hospital: a las puertas de Urgencias existe un espacio para las ambulancias, pero al no estar indicado, todo tipo de vehículos ocupan habitualmente estas plazas , con lo que se dificulta el traslado de los enfermos al hospital.

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