La ola de frío siberiano que asoló Vizcaya la semana pasada no sólo dejó caras congeladas, nuevos virus de la gripe, retrasos en los aviones o atascos en las carreteras. En estas últimas, además, se dieron lugar un buen número de accidentes, resbalones y pequeños golpes que han llenado durante los últimos días todos los talleres del territorio.

Según un estudio elaborado por Audatex España, el temporal de frío y nieve disparó los siniestros en las carreteras vizcaínas un 26%, lo que obligó a muchos conductores a pasar por el taller para arreglar el coche.

De hecho, según el informe, la demanda de reparaciones en la comarca del Gran Bilbao ha aumentado un 18%. "Sí que hemos notado un incremento de clientes después del temporal, sobre todo en problemas de chapa debido a los descuidos", señala Mari Cruz Hernández, de Talleres Hernández Martín, en Bilbao.

Los pequeños golpes provocados por el hielo son la gran mayoría de las causas de que los clientes acudan al taller, aunque "también hemos tenido a alguno que ha terminado en la cuneta", añade Hernández.

No obstante, este inesperado aumento de trabajo ha supuesto un pequeño alivio para los talleres vizcaínos, que están acusando la crisis económica de manera considerable. "Si se ve al salir a la calle, cada vez menos gente utiliza el coche, por lo que hay menos reparaciones que atender", explica Antonio Santos, de Talleres Bilbao.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE BILBAO