Según ha informado la Conselleria de Administraciones Públicas y Modernización, este plan de actuación fue aprobado por la Comisión Técnica de Desaparecidos y Fosas de Baleares y se ha desarrollado entre el 15 de septiembre y el 2 de octubre.

En concreto, con los trabajos se han realizado tres sondeos en la "fosa común izquierda", junto al lugar donde fue encontrada una fosa en la campaña anterior.

MUNICIÓN Y RESTOS HALLADOS

En dos de los tres sondeos se ha encontrado munición de la época objeto de estudio, concretamente siete vainas de fusil, un proyectil sin disparar, un proyectil de fusil disparado y dos vainas de arma corta.

Según han señalado desde el Govern, en todas las aperturas practicadas en el subsuelo, se han encontrado varios fragmentos de cráneo, algunos con fracturas de aspecto 'perimortal' -producidas en el momento de la muerte- y otras con posibles lesiones producidas por el paso de un proyectil de arma de fuego.

Estos fragmentos forman parte de concentraciones de huesos desarticulados que ahora se encuentran dispersos, fruto de la constante reutilización del cementerio hasta la década de los 80.

El equipo iniciará ahora el estudio antropológico y forense de estos restos óseos para intentar concluir a cuántos individuos pertenecen y cuántos de estos fragmentos de cráneo presentan realmente lesiones 'perimortales'. A partir de estos resultados, se analizará si se puede iniciar un protocolo de ADN de los restos.

Estos hallazgos se han localizado a una profundidad de entre 80 centrímetros y un metro, coincidiendo con la cota en la que se localizó la fosa en 2018.

Las tareas desarrolladas también han permitido documentar la presencia de marcas de impactos producidos con arma de fuego en la pared de una de las capillas laterales que está junto a los sondeos excavados. Esto, junto al hallazgo de diferentes tipos de munición, sugiere que los fusilamientos se produjeron en esa zona.

NUEVAS INTERVENCIONES

Por otra parte, la Secretaría Autonómica de Memoria Democrática y Buen Gobierno ya estudia la posibilidad de llevar a cabo una tercera intervención en el cementerio viejo de Ibiza con el objetivo de seguir avanzando en la posible identificación de hasta 70 víctimas de la represión franquista.

Así lo ha anunciado el director general de Memoria Democrática, Marc Herrera, con motivo del balance de esta segunda fase, puesto que en esta intervención no ha dado tiempo a realizar el cuarto sondeo que estaba previsto inicialmente.

Herrera ha avanzado que esta tercera intervención se incluiría dentro del Plan de Fosas 2020-2021 en el que ya trabaja la Secretaría Autonómica. La decisión debe tomarse en el seno de la Comisión Técnica de Desaparecidos y Fosas.