Según indica el consorcio en nota de prensa, entre las principales partidas destaca "la parte correspondiente a la inversión plurianual de la planta de clasificación de basura bruta, a la que se destinarán 16.885.110 euros, y cuya entrada en funcionamiento está prevista para 2023".

Otras inversiones previstas son las destinadas a finalizar la ampliación del vertedero de rechazos, incluida la ampliación de la planta de lixiviados; la ampliación y mantenimiento de la flota de vehículos para la recogida de basura y la modernización y extensión de la red de puntos limpios y estaciones de transferencia, así como la mejora de la planta de residuos de construcción y demolición.

La junta ha aprobado también la liquidación de las cuentas correspondientes a 2019, trámite que tuvo que aplazarse hasta ahora a causa de la crisis sanitaria provocada por la covid-19. Estas cuentas, con una cifra de negocios de 40.731.000 euros, se cerraron con un resultado positivo de 2.167.833 euros, que se destinarán a incrementar la dotación de reservas voluntarias de la sociedad.

La reunión estuvo presidida por Juan Cofiño, vicepresidente del Gobierno y consejero de Administración Autonómica, Medio Ambiente y Cambio Climático, y contóm también con la presencia de la viceconsejera de Medio Ambiente y Cambio Climático, Nieves Roqueñí, y del gerente del consorcio, Santiago Fernández.