El violencia vuelve a golpear dura en Ciudad Juárez (México). Tres sedes de la Policía y un coche patrulla han sido tiroteadas dejando un saldo de cuatro agentes muertos y uno herido.

Los cuatro ataques ocurrieron cerca de la medianoche del domingo, cuando los sicarios dispararon contra un puesto policial en el Hospital General, una caseta de vigilancia de una zona residencial, la comandancia de Aldama y un coche patrulla cerca de uno de los cruces con Estados Unidos.

En el hospital (norte de la ciudad) murieron dos agentes, uno dentro del coche patrulla (noroeste) y el cuarto en la estación de Aldama (suroeste), dijeron fuentes de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal (SSPM) de Ciudad Juárez, que pertenece al estado de Chihuahua, fronterizo con Estados Unidos.

Ante estos ataques, los agentes patrullan la ciudad en caravanas de dos a cuatro vehículos policiales.

Otros cuatro cadáveres como advertencia

Por otra parte, las autoridades informaron del hallazgo de cuatro cadáveres a pocos metros de la Comandancia de Policía Estatal (Cipol), junto a los que fue dejado un mensaje con una lista de 28 nombres, presuntamente agentes policiales, contra los que se va a atentar.

Los cuerpos de las víctimas estaban esposados y con los ojos vendados y una de ellas, de 25 años, fue decapitada. La cabeza de Padilla fue colocada entre sus piernas, y además le colocaron un gorro de Papá Noel.

Ciudad Juárez, limítrofe con El Paso (EE UU), es hasta ahora la localidad más violenta de México, con más de 1.400 muertos en 2008, víctimas de grupos del narcotráfico que se disputan las rutas de introducción de droga en los Estados Unidos.