"Si bien desde la delegación de Protección Ciudadana se insiste en que la decisión de trasladar la policía de barrio a las patrullas es temporal, creemos que de fondo el problema es de absoluta carencia de personal, pues desde 2015 la plantilla tiene casi 200 efectivos menos", ha criticado Estellés.

Ha añadido que "esta situación se debe a que el concejal, Aarón Cano, mantiene una plantilla por debajo de los mínimos necesarios". Y ha anunciado que pedirá explicaciones a este edil "por el desmantelamiento de la policía de barrio en la próxima comisión de Protección Ciudadana".

"Se puede entender que quiera llegar con patrullas a todos los puntos de la ciudad con más flexibilidad, pero no a costa de alterar las necesidades de seguridad, conciliación y cercanía que realiza la policía local en los barrios", ha criticado el edil.

"En el primer intento de 'desmontaje' estival de la policía de barrio, desde Protección Ciudadana se argumentó que era porque los colegios estaban cerrados, pero ahora esta excusa no se sostiene", ha agregado Estellés.

Además, ha incidido en que "para poder vigilar la cuarentena ambiciosamente, como pretenden, y el entorno de los colegios y comercios, se puede hacer mejor con una perspectiva de más cercanía como la que proporciona la policía en los barrios".

El edil ha denunciado que "en cada departamento o sección de policía local nos encontramos el mismo problema de necesidad de efectivos" y "para un tema tan importante, como es la prevención de drogas en la proximidad de centros escolares o controles en la ciudad o en locales cerrados, la Policía Local sólo dispone de tres agentes y cuatro canes adiestrados, si se cuenta el último can del convenio de julio de 2020, habiendo quedado vacantes dos plazas de agentes en el último concurso de personal".