Así, las primeras contrataciones de uva para cava se están pagando a 0,23 euros por kilo, lo que equivale a unas pérdidas de 600 euros por hectárea, ha estimado la organización agraria.

A esto se suma algo "aún más grave", en su opinión, como es el hecho de que a pesar de que ya se ha iniciado la vendimia para el resto de variedades "ni siquiera hay un precio establecido".

El presidente de APAG Extremadura Asaja ha destacado que "se repite la situación, con unos precios de miseria que ni siquiera cubren los costes de producción. Esto confirma, una vez más, que la ley de la cadena alimentaria, que fue modificada en el mes de febrero, continúa siendo ineficaz".

Ante esta situación, APAG Extremadura Asaja ha reclamado la implicación de la administración regional y de la Agencia de Información y Control Alimentarios (AICA) para que no se firmen contratos por debajo del coste de producción establecido en otras comunidades mientras se sigue a la espera de que se lleven a cabo los estudios de costes de producción en Extremadura.

Según ha apuntado, los datos que ya hay disponibles de regiones como Castilla-La Mancha y Andalucía apuntan a costes de producción de 0,27 euros / kilo en uva blanca y de 0,29 euros / kilo en uva tinta, "lejos de lo que se está pagando en Extremadura".

Metidieri ha insistido en que "no se puede vender por debajo de los costes de producción", y ha pedido a los responsables políticos "que se tomen medidas reales y eficaces, que se hable menos de lo que se quiere hacer y que de una vez por todas se solucione la crisis endémica de los bajos precios" del campo.