Caja España ha destinado al Obispado de León 41.000 euros para financiar la compra de esta cámara. Una de sus ventajas es que permite acabar con los insectos que amenazan la conservación de las obras de arte sin emplear productos químicos. El proceso se basa en someter durante 20 ó 24 horas a estos agentes a muy bajas temperaturas, sobre los 20 grados bajo cero.

A continuación, se le aplica un tratamiento preventivo antes de iniciar la restauración. El obispo de León, Julián López, indicó que esta cámara es la única con que disponen las autoridades eclesiásticas de la Comunidad.

Todas las diócesis

De este equipamiento, ubicado en el Centro de Conservación del Patrimonio de León, se beneficiarán todas las diócesis lo que permitirá poner en valor las obras de arte sacro, uno de los “recursos” de Castilla y León. Según el presidente de Caja España, Santos Llamas, de esta forma se genera desarrollo, progreso, empleo y se impulsa el crecimiento económico de numerosas comarcas.

Además en el Centro de Conservación del Patrimonio de León emplea desde hace un año a cinco personas –tres discapacitados y dos profesionales-. Caja España destina anualmente 97.000 euros para sufragar el mantenimiento de la actividad de estas instalaciones.

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