Un hombre de unos cincuenta años fue hallado desorientado en los alrededores de un cementerio de la ciudad egipcia de Zaqaziq mientras se disponía a dormir en la zona donde se encuentran las tumbas. El suceso, ya de por sí rocambolesco, dio un giro cuando, poco después, se identificó al varón como una persona que había sido dada por muerta e incluso enterrada cuatro meses atrás, según informó el diario local Youm7.

Mohammed Al Gammal, que sufre una enfermedad mental desde hace cuatro años, había desaparecido de su hogar el pasado mes de enero sin dejar rastro. No era la primera vez que Al Gammal se fugaba sin previo aviso, ya lo había hecho al menos una ocasión antes, aunque acabó apareciendo.

Según el citado diario, su familia lo anduvo buscando hasta que recibieron la llamada de un familiar que trabajaba en un hospital cercano informando del hallazgo de un cadáver cuyos rasgos eran muy parecidos a los de Gammal. Los padres de Gammal identificaron el cuerpo como el de su hijo y enterraron los restos el pasado marzo.

Meses más tarde, un grupo de jóvenes lo halló vagando desorientado por el cementerio de una vecindad local y lo entregó a las autoridades que contactaron con su familia.