Desde que no son amigos, Iván se dedica a analizar las reacciones de Loli en Gran hermano.

El modelo tiene sus teorías. Loli ha querido que la nominasen por su carácter competitivo, pero en realidad no tiene ninguna gana de abandonar el programa "tiene miedo al fracaso".

Mientras tanto, Liz se siente incómoda en la Guadalix. La convivencia no resulta como ella esperaba. Su relación con el sector femenino va de mal en peor. "Siempre me he llevado mejor con los chicos, fuera de aquí es igual", dice la dominicana en el confesionario.

Creando un monstruo

Por otro lado, Loli y Nani alientan a Gisela para que saque ese carácter que lleva dentro. Al poco de decirlo, la canaria discute con Iván por culpa de la prueba semanal. "Estoy cansada de que me pisoteen en esta vida", le dice Gisela a sus amigas.

Iván cree que Gisela no es mala chica y que lo que sucede es que la están "manipulando". ‘Las dos caras de Gisela' no le gustan a Liz y la modelo asegura que la seguirá nominando mientras siga en el concurso.

Los dos concursantes han ido afianzado su amistad a medida que se sienten rechazados por el resto de la casa. Como veterano en esto, Iván le da un consejo a Liz: "Intenta pasarlo lo mejor posible y a las malas caras dientes, como diría la Pantoja".