Según ha informado el instituto armado, el pasado mes de abril se puso en marcha una investigación con el fin de localizar establecimientos que pudieran estar comprando pescado y marisco de manera ilegal.
La Patrulla Fiscal tuvo conocimiento entonces de la existencia del citado restaurante de Bareyo, que se sometió a vigilancia. El pasado domingo se localizó a un vehículo que accedía al aparcamiento del establecimiento y del que bajaron tres hombres transportando cubos y cajas de diferentes tamaños.
Uno de ellos entró al restaurante y fue identificado por los agentes, que comprobaron que en los recipientes había un total de 15 bonitos, quelos sospechosos habían pescado ese mismo día a bordo de una embarcación ahora atracada en el puerto de Laredo.
Una vez pescados, los trasladaron fueron al restaurante para ser vendidos, supuestamente, sin haber pasado por lonja, algo obligatorio para realizar esta transacción de manera legal.
Los hechos serán puestos en conocimiento de Sanidad del Gobierno de Cantabria, y el pescado incautado fue entregado a un centro benéfico de la zona.
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