Las estaciones de esquí de Candanchú, en la provincia de Huesca, y de Valdelinares, en Teruel, se suman este fin de semana a los centros invernales de Astún y Formigal que ya iniciaron la temporada el pasado fin de semana. Candanchú se incorpora mañana a una de las campañas más madrugadoras de la nieve aragonesa en los últimos años y lo hará con precios especiales en los abonos de día para las jornadas del sábado y domingo.

Así, el precio será de 25 euros para los adultos y de 19 para los infantiles y, en el circuito de fondo, el acceso será gratuito. Este centro invernal del valle del Aragón prevé poner en funcionamiento 14 pistas (dos verdes, siete azules y cinco rojas) con espesores de nieve de 15 centímetros en Tobazo Bajo y Pista Grande, 50 en Tobazo y entre 60 y 100 centímetros en la zona de la Tuca. En cuanto a los remontes, pondrá en marcha tres telesillas, siete telesquíes y una cinta de transporte que darán acceso a un total de 13 kilómetros esquiables.

También en Teruel comienza este fin de semana la temporada en la estación de Valdelinares, perteneciente al grupo Aramón, que dispondrá de 2 kilómetros esquiables, 2 pistas y 3 remontes y sigue produciendo nieve con el fin de mejorar los espesores para alcanzar los 40 centímetros. En la provincia turolense, el centro invernal de Javalambre abrirá la temporada el sábado 29 y los otros dos centros del grupo Aramón, Panticosa y Cerler, lo harán un día antes, el viernes 28.

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