Según ha informado este viernes la Jefatura Superior de Baleares en un comunicado, los supuestos hechos delictivos se han producido desde principios de año, después de haber recibido diversas denuncias por robos a punta de navaja e incluso con agresiones en Son Gotleu, Pere Garau y Santa Catalina y alrededores.
Según el relato de los agentes, los supuestos autores de los robos actuaban, mayoritariamente, sobre víctimas que salían de un bar de copas o una sala de fiestas y de madrugada, aprovechándose la poca visibilidad, la poca afluencia de personas.
Las investigaciones de los agentes de policía se centraron en dos personas hasta que se logró identificar a una de ellas.
Los supuestos autores abordaban a sus víctimas por sorpresa y las agredía sin mediar palabra, o las amenazaba poniendo un cuchillo en el cuello para acto seguido sustraerles lo que llevaban en los bolsillos, entre dinero y teléfono móviles.
El Grupo de Atracos se hizo cargo de la investigación y tras algunas gestiones identificó al presunto autor y lo arrestó este jueves acusado de seis robos con violencia y dos de lesiones.
Las investigaciones continúan abiertas y no se descartan nuevas detenciones, así como el esclarecimiento de otros hechos.
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