En el señalamiento judicial, recogido por Europa Press, se considera probado que el 4 de julio de 2017, el acusado se acercó a la víctima, que se hallaba sentada en un banco enfrente de la estación de autobuses de la ciudad con la intención de ejercer la prostitución, y entabló una conversación con la misma en la que acordaron dirigirse a una arboleda situada en la carretera de Ayora a fin de mantener relaciones sexuales a cambio de dinero.
Al llegar al lugar, el acusado le dijo que no tenía dinero y que le pagaría posteriormente, a lo que la mujer se opuso e intentó marcharse. Ante esta actitud, el acusado la empujó, la tiró al suelo y le tapó la boca con la mano, según el relato de la Fiscalía.
Acto seguido comenzó a quitarle la ropa amenazándole para mantener relaciones sexuales, llegando a consumar la relación. La mujer presentó denuncia y parte de lesiones al día siguiente.
Según el Fiscal, los hechos son constitutivos de un delito de agresión sexual, por el que solicitan una pena de 9 años de prisión, así como la prohibición de acercarse a la víctima a una distancia inferior a 500 metros.
Pide igualmente 10 años de libertad vigilada y otros 18 meses de prisión por el delito de lesiones; así como indemnizar a la víctima con 7.300 euros.
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