Más vale prevenir que curar. Con esta filosofía ha ideado una empresa valenciana de reciente creación, Biótica, un dispositivo para detectar la bacteria de la legionela en menos de una hora, frente a los 15 días de los análisis tradicionales, un ahorro de tiempo que puede evitar muertes por neumonías graves, ingresos hospitalarios o pérdidas a las industrias por estar paradas.

En los últimos 10 años, las infecciones por esta bacteria han registrado tasas de crecimiento del 52% anual, pasando de los 201 casos registrados en 1997 a los 1.178 del año pasado. Este repunte afecta sobre todo a la Comunitat Valenciana, por el grado de humedad y sus elevadas temperaturas. Esta autonomía duplica la tasa nacional de casos y concentra el 20% del total, por delante de Cataluña, Andalucía y País Vasco, según datos de la Red Nacional de Viligancia Epidemiológica.

De hecho, de enero a octubre de este año ya se han registrado 819 nuevos contagios en España (202 de ellos en Valencia), y los investigadores han constatado que los brotes ya no se producen sólo en épocas estivales, sino que la bacteria se ha hecho más fuerte. El impacto económico se traduce en 20.000 euros por hora de parada para las industrias y en 28 millones al año para la Sanidad pública.

El dispositivo patentado por la firma valenciana es el primero a nivel mundial que permite detectar la proliferación de la bacteria en 60 minutos. "La detección precoz en las instalaciones de riesgo (unas 30.000 sólo en la Comunitat Valenciana) reduciría drásticamente la posibilidad de la infección en el ser humano", explica el jefe de Laboratorio de Biótica, Daniel Canós.

Salmonela y tumores, en el futuro

El kit, que cuesta 450 euros y sirve para 10 análisis, no requiere la intervención de un profesional y está pendiente de la validación de la Conselleria de Sanidad para aplicarlo en sus inspecciones. Funciona con una muestra de agua, que toma una coloración diferente en función de la presencia de la bacteria y su grado de concentración. Los promotores del proyecto lo extenderán en los próximos años a la detección de la salmonella y de los marcadores tumorales.