A las 0.00 del lunes comienza oficialmente el desalojo, que hasta el miércoles será voluntario. La operación se pondrá en marcha justo después de la última manifestación de los anaranjados, los opositores del sionismo religioso y de la derecha, prevista para esta noche frente al despacho del primer ministro israelí, Ariel Sharón, en Jerusalén.

Los colonos decididos a resistir el desalojo de los asentamientos israelíes aún en pie en Gaza tratarán de impedir la entrada de los agentes de policía y los soldados de la llamada Operación confraternidad que deben entregarles la orden.

Fuentes del Consejo de los Asentamientos (YESHA) informaron hoy de que las familias que resistan a la evacuación formarán una barrera humana sentándose junto a los accesos a los asentamientos -defendidos por vallas para impedir la infiltración de milicianos palestinos- e impedir de esa manera el reparto de las órdenes.

Las órdenes deberán distribuirlas oficiales del Ejército, que en los últimos 38 años de la ocupación ha estado en Gaza para proteger a los colonos, y de la Policía Nacional, 2.500 de cuyos agentes, desarmados, procederán al desalojo.

La gigantesca operación comenzará cuando el Ejército selle a medianoche el acceso de israelíes a Gaza en los puestos fronterizos de Erez, al norte, y Kisufim, al sur.

No se sabe por dónde comenzarán

Las autoridades a cargo de la Operación Confraternidad no revelarán hasta el último momento por cuál de los 21 asentamientos judíos de la franja palestina de Gaza comenzará el desalojo.

El Gabinete Nacional, que preside el primer ministro Ariel Sharón, aprobó la semana pasada el desmantelamiento de tres de ellos -Netzarim, Kfar Darom y Morag-, pero esto, han aclarado fuentes oficiales, no significa que sean los primeros.

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