El fallo de la Sección Primera impone, asimismo, una indemnización para los familiares de D.M.V que asciende a 80.000 euros y que fue cerrada de conformidad entre las partes el pasado día 21, momentos antes de que se constituyese el jurado que habría de dirimir la culpabilidad del acusado durante vista oral, que quedó suspendida.
Así, el magistrado ponente Rafael García Laraña considera probado que D.Z, en prisión provisional desde el 25 de mayo de 2006, decidió acabar con la vida de la víctima tras una pelea en la que participaron otros tres compatriotas y que se desencadenó tras una fiesta en el paraje conocido como 'El Padrino' en la consumieron "mucho alcohol" ya que acababan de cobrar sus jornales.
El acusado, una vez se quedó a solas con D.M.V., de 35 años, cogió un cuchillo de cocina provisto de empuñadura de plástico negro y dotado con una hoja de diez centímetros con el que le asestó seis puñaladas en el cuello, que le causaron la muerte casi inmediata por shock hemorrágico, según sostiene la sentencia, pese a ser trasladado hasta el hospital comarcal de La Inmaculada.
Señala, asimismo, que las riñas de este tipo solía ser habitual en el interior del cortijo habitado por el condenado, un hermano y otros tres hombres. La convivencia transcurría de "forma poco apacible" y plagada --ahonda el tribunal-- de hechos violentos tanto de palabra como de obra y que se acentuaban cuando éstos consumían alcohol, un hábito frecuente entre ellos".
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