"El pasado sábado éramos muy pocos quienes pensábamos abrir, pero conforme han ido pasando las horas, muchos propietarios se han ido animando por la respuesta de sus clientes más fieles", ha afirmado la responsable de 'El gusanito lector', Esperanza Alcaide, a Europa Press.

La también vicepresidenta de la Federación Andaluza de Libreros (FAL) ha destacado que, si bien el modelo de negocio, con cita previa, no es el más idóneo para esta actividad, ha influido en la decisión final la coyuntura económica por la que atraviesa el sector. "Ha pesado mucho, junto a la falta de liquidez, las ganas de ver a la clientela, poder compartir de nuevo libros, así como el cariño que hemos recibido de ellos y su constante deseo de que abriéramos ya las puertas", agrega.

No obstante, en el gremio existen aún muchas dudas acerca de los protocolos de desinfección en locales y en materiales que reciben de los proveedores. "Desconocemos, por ejemplo, si los pedidos deben permanecer en un almacén durante 14 días o es suficiente la desinfección, libro por libro, para su inmediata puesta a la venta", ha asegurado Verónica Durán, presidenta de la Feria del Libro de Sevilla.

Los libreros afirman que la mecánica en la actividad se irá viendo en los próximos días aunque la tónica general será el uso de desinfectantes antes y después de la consulta, en el mostrador, de una serie de libros propuestos o recomendados. En este sentido, preocupa un problema común en otros comercios y, en general, en la ciudadanía como es la falta de guantes desechables. "Disponemos de geles hidroalcohólicos en los establecimientos, pero no sabemos si podremos contar con guantes de protección", ha añadido Durán.

La Federación de Libreros de Andalucía está integrada por 21 firmas de la provincia -19 de ellas en la capital-, entre ellas, Caótica, Baobad, La Fuga, Padilla, Yerma y El gusanito lector.