Los vecinos de Bilbao ya no tendrán por qué acudir al Ayuntamiento o a otras administraciones para tramitar gestiones como el pago de multas y facturas, solicitar un certificado de empadronamiento, matricular a los hijos en el colegio, pedir una subvención o cualquier otro trámite administrativo.

La informática e Internet echarán una mano a las oficinas administrativas y a los funcionarios del Ayuntamiento. Aunque éstos, claro está, no van a desaparecer.

Una decena de pequeñas oficinas electrónicas, similares a un kiosco o un cajero, harán las veces de ventanilla municipal. Se instalarán a principios del próximo año en otros 10 puntos de la ciudad y estarán disponibles durante las 24 horas los 365 días del año.

"Estamos pensando instalarlas en la estación de tren, en Termibus... lugares que están protegidos y abiertos", explicó la concejala de Relaciones Ciudadanas, Isabel Sánchez Robles. El Ayuntamiento ya ha firmado un acuerdo con la Fundación Europea para la Sociedad de la Información y la Administración Electrónica para desarrollar este proyecto.

El nuevo sistema evitará las colas y las esperas y dará a los ciudadanos facilidades para relacionarse con la administración, tanto local, como autonómica, estatal y europea, de modo que dispongan de impresos o puedan estampar su firma electrónica.

Y, además, a Bilbao la saldrá gratis, ya que es la Unión Europea la que financiará este sistema. En principio serán 10 oficinas, pero pronto podrán ser más, ya que el Consistorio tiene la intención de extenderlas por la ciudad y ubicarlas en plena calle, puntualizó Sánchez Robles. No es un sistema nuevo. Ya funciona con éxito en Gijón y se está desarrollando en Vitoria y Donostia.