Desde el momento en el que los agentes conocieron este hecho enviaron diversos policías de paisano al centro escolar para vigilar que dicho menor no volvía a hacer de 'camello'.

Algunos padres que veían merodear al niño por los alrededores del centro también dieron la voz de alarma.

Así como profesores y alumnos que también sospechaban que el alumno vendía droga.

El jefe de estudios del centro llamó el pasado 15 de octubre a la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Sant Andreu para informar de los hechos y pedir la implicación policial en el caso.

La patrulla que se trasladó al colegio pertenece a la Oficina de Relaciones con la Comunidad, que está en permanente contacto con directores y profesores de todos los centros educativos de Barcelona.

Los efectivos policiales hablaron con el menor cuando se encontraba en el interior del centro escolar.

El niño confesó

El menor que presuntamente vendía droga confirmó a los Mossos que distribuía sustancias estupefacientes a través de un ex alumno que se las suministraba.

En el momento de ser interrogado, el chico llevaba encima 110 euros posiblemente reunidos con la venta de hachís.

Los agentes le incautaron una navaja de pequeñas dimensiones que también llevaba encima.

El pequeño quedó ese día bajo la custodia del centro ya que por ser menor de edad no se le puede imputar un delito. Los agentes pusieron el caso en conocimiento de la Fiscalía de Menores y de la Dirección General de Atención a la Infancia.

Localizan al otro chico

Los Mossos iniciaron una investigación para encontrar al otro joven que facilitaba las drogas al menor de 12 años. Los agentes se trasladaron el pasado 16 de octubre a la zona del parque de la plaza Can Fabra de Sant Andreu, al tener constancia de que el ex alumno que buscaban se suele mover por allí.

Finalmente detuvieron al presunto suministrador, identificado como Miguel C.N., de 19 años y de nacionalidad española.

El joven no tiene antecedentes policiales y en el momento de ser localizado no llevaba drogas encima pero si 75 euros en billetes que presuntamente podría haber obtenido con la venta ilegal de sustancias estupefacientes.