El ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha ofrecido este martes a las víctimas del terrorismo una ley integral, que acabe con las "lagunas" detectadas en los anteriores textos, solvente los agravios comparativos que se producen entre unos casos y otros y haga además una defensa de su dignidad.

Esas son algunas de las consideraciones realizadas por Rubalcaba ante las cerca de 50 víctimas, representantes de unas cuarenta asociaciones y fundaciones, que han acudido a la sede del Ministerio para dar su opinión del incipiente borrador del Gobierno sobre la nueva ley de víctimas, que está previsto que se apruebe en esta legislatura.

Rubalcaba ha insistido en que quiere escuchar a las víctimas, antes de que el borrador se traslade al Parlamento, donde el Gobierno va a trabajar para que sea aceptado por todos los grupos, como lo fue la anterior ley de 1999. Una ley, que según el ministro, "cumplió muchas de sus previsiones", aunque también tiene algunos artículos que, vistos ahora con perspectiva y casi diez años después, se debían haber redactado de otra forma.

Acuerdo con el PP

Sobre este asunto, el PP ha anunciado el "acuerdo final" con el Gobierno sobre el contenido de una nueva ley, que supone la retirada de las calles de las placas o de los símbolos que enaltezcan a terroristas o a actividades terroristas. Asimismo, entre otros objetivos, la ley reconocería como víctimas del terrorismo a las personas que padecen secuelas psicológicas a consecuencia de un atentado y a los españoles fallecidos en atentados perpetrados en el extranjero.

Además, se pretende solventar algunos agravios comparativos que se producen por ejemplo en relación con las indemnizaciones, entre las víctimas que cuentan ya con una sentencia y las que no.