En época de vacas flacas viajar pasa a ser una de las actividades prescindibles en las maltrechas economías de las familias. El turismo se resiente por la crisis y en Granada empieza a notarse. En los meses de junio, julio y agosto de este año, nuestra provincia ha recibido un 2,8% menos de turistas que en el mismo periodo de 2007. Este verano hemos tenido 594.440 viajeros frente a los 611.412 del año pasado.

Además, según los datos del Instituto de Estadística de Andalucía (IEA), quienes han visitado Granada este verano se han quedado menos tiempo, ya que el número de pernoctaciones ha bajado un 5,6% en esos meses.

«Estamos observando un cambio de hábitos en los turistas que nos visitan, que cambian el mes de julio por el de septiembre, al ser más barato», asegura el vicepresidente del Patronato Provincial de Turismo de Granada , José López Gallardo.

No obstante, mientras el número de turistas españoles permaneció casi igual al del verano pasado, el de extranjeros experimentó un descenso más acusado (5,5%). Para López Gallardo, el extranjero, como el español, tiene problemas económicos y tiende a realizar más viajes de proximidad. Esto explicaría que hayan sido las pernoctaciones de residentes en nuestro país las que más han bajado este verano (7,4%).

Pese a que 2008 «no ha sido un año bueno», el responsable del Patronato de Turismo mantiene que nos encontramos en el tercer mejor año en cuento a visitas de la historia de Granada, tras la bonanza vivida en 2006 y 2007.

La media anual será positiva

El vicepresidente del Patronato Provincial de Turismo de Granada, José López Gallardo, confía en que, pese a los datos negativos de los meses de verano, la media del año se recupere hasta diciembre y la provincia arroje un crecimiento del número de visitas del 3% a final de año.

«No es gran cosa, pero es lo que se espera en el resto de Andalucía», asegura López Gallardo. A su juicio, estos datos demuestras que el turismo «resiste mejor que otros sectores la crisis económica.

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