El próximo sábado 11 de octubre, John Cale estará rindiendo un merecido homenaje a Nico en el Southbank Centre de Londres . Lo hará con un concierto, Life along the borderline, en el que participarán, entre otros, Dean Bradfield de Manic Street Preachers, Guillemots, Mark Lanegan, The Fiery Furnaces, Mark Linkous de Sparklehorse, Peter Murphy y Lisa Gerrard de Dead Can Dance. Ellos estarán interpretando algunas de las canciones más emblemáticas de la artista. Simultáneamente se celebrará otro concierto en el Volksbühne de Berlín , en el que participarán Jay - Jay Johanson, Martha Waingright y Islands. Estos homenajes se celebran cuando se cumplen 70 años del nacimiento de la artista alemana.

Nico hace tiempo que se ha convertido en un personaje de culto y en uno de los nombres más importantes de la iconografía del rock, pero en vida, sin embargo, no tuvo la misma suerte.

Nacida Christa Päffgen, la alemana se dio a conocer como modelo, aunque su gran oportunidad llegó de la mano de Fellini, que le dio un pequeño papel en La dolce vita. A partir de ese momento, Nico estuvo ligada a algunos de los creadores más importantes de su época.

Sin embargo, por lo que muchos la conocen, es por ser la voz femenina por antonomasia del disco de debut de la Velvet Underground . Su presencia, que fue impuesta por Andy Warhol , no tuvo muy buena acogida entre sus miembros. Al final, Nico no volvió a grabar con la Velvet, pero su colaboración en ese álbum dejó una huella imborrable, sobre todo en canciones como All tomorrow’s parties o Femme Fatale.

Tras su paso por la Velvet, Nico intentó triunfar en solitario. Su primer álbum como solista, Chelsea girl, contó con la colaboración de John Cale, Jackson Browne, Sterling Morrison y Lou Reed, y en él hay canciones tan inolvidables como I’ll keep it with mine o These Days. A Chelsea Girl le siguieron álbumes más oscuros, como The Marble Index, Desertshore o Drama of Exile. Se trata de álbumes mucho menos accesibles, y que por tanto, nunca gozaron de éxito comercial. Es en esa época, ya en los 80, cuando una Nico heroinómana y al borde del abismo sale de gira por Europa defendiendo su repertorio con la ayuda de un armonio. El 18 de julio de 1988, Nico fallecía en Ibiza, tras un derrame cerebral provocado al caerse de la bicicleta.