Sevilla ha visto cumplido hoy una reivindicación con más de 75 años. El Gobierno central ha cedido finalmente la casa número 6 del Patio de Banderas al Ayuntamiento, que para el próximo año la convertirá en centro de recepción de escolares al Alcázar y centro de investigación del que está considerado palacio real más antiguo de Europa.

El Alcázar es propiedad de la ciudad desde el año 1931. El Consistorio comenzó a solicitar al Gobierno central la cesión de las viviendas del Patio de Banderas (la mayoría tienen uso residencial privado) y de varias de la Judería y la Plaza de la Contratación, al considerarlas partes del conjunto monumental, en 1932.

A pesar de sus negociaciones, hace unos años Patrimonio del Estado sacó a subasta la casa que albergó el Cuerpo de la Guardia del palacio.

El Ayuntamiento no pierde las esperanzas de recuperar los 19 inmuebles que solicita y ya piensa en el siguiente paso: conseguir la número 15.

Centro de Interpretación

El objetivo del Gobierno municipal es convertirla en centro de interpretación del Alcázar, que estaría comunicado con la cripta arqueológica subterránea que pretende construir en el Patio de Banderas, que albergaría, por ejemplo, los restos del antiguo puerto sevillano.

La casa número 6 cuenta con tres plantas (de algo más de 70 metros cuadrados cada una) y azotea. El inmueble tendrá que ser rehabilitado, por lo que ya se trabaja en el proyecto.

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