El PP de Coria reclama una junta local de seguridad en torno a los hedores de la barriada Guadalquivir

El Grupo popular del Ayuntamiento de Coria del Río (Sevilla) ha pedido al Gobierno local del andalucista Modesto González, que reúna "urgentemente" la junta local de seguridad en torno a las novedades de la barriada Guadalquivir, castigada desde hace varios años por unos episodios de hedor cuyo origen exacto aún no ha sido plenamente esclarecido.

El portavoz del PP de Coria, Andrés Parrado, ha señalado el conocido informe del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, que a partir de muestras de sangre de ocho vecinos de la barriada Guadalquivir de Coria detecta "bajas concentraciones" de N-hexano y acetona en la sangre de estas personas, con el riesgo de mayores "probabilidades" de que las mismas sufran las "patologías" médicas asociadas a la "acción tóxica" de tal disolvente orgánico.

Además, ha señalado la decisión de Ecologistas en Acción de reclamar una investigación judicial sobre una posible fuga de gases tóxicos con relación a una gasolinera de la zona y la reciente comparecencia de numerosos vecinos de la barriada ante el Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil.

Todo ello, a su entender, "obliga al gobierno municipal a informar convenientemente sobre estos hechos, para aclarar qué es lo que está pasando y como se está gestionando este problema enquistando". En ese sentido, el portavoz popular recuerda que el pasado 20 de febrero registró una petición en demanda de una reunión urgente de la junta local de seguridad, con la participación del profesor Manuel Salguero como representante del Instituto Nacional de Toxicología, siendo reiterada el día 27 dicha demanda.

Avisando de que estas peticiones no han tenido aún "respuesta", Parrado avisa de que se trata de "una situación de máxima gravedad que necesita tomar medidas extraordinarias y urgentes". En caso de que no sea convocada la junta local de seguridad, según los populares, los mismos promoverán la convocatoria de un pleno Extraordinario sobre el asunto.

Porque aunque en principio en las tuberías residuales de Coria fueron detectadas dos sustancias no cancerígenas pero sospechosas, en concreto fenol y dimetilacetamida, siendo barajadas diversas hipótesis como pozos negros o un supuesto foco de contaminación en un antiguo taller mecánico situado entre las calles Retuerta y Batán, en septiembre de 2018 la sociedad mancomunada Aljarafesa exponía que al menos entonces, todavía no se había "determinado exactamente el origen o el foco ni se puede precisar que el problema esté en el colector" de tal empresa o en las redes interiores de Coria.

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