El terror se coló ayer en los pasillos de la facultad de Derecho, y eso que no había ningún universitario cerca con el gusanillo por los nervios de un examen. En el edificio tocaba estar en silencio: se rodaba ‘Un buen hombre’, una película que cuenta con capital gallego (Milú Films) y que trajo el misterio al edificio de la mano de sus protagonistas, Tristán Ulloa y Emilio Gutiérrez-Caba.

El revuelo que originó el rodaje ya se notaba en el exterior de la facultad -dos camiones con decenas de metros de cable- y en el medio centenar de profesionales que rodeaba la escena en la segunda planta de la facultad.

Queda claro que la Universidad pasa la prueba de la alfombra roja: “Para el director, este escenario es brutal, tiene mucho juego, en reflejos, ángulos y formas”, confiesa Juan Martínez Moreno, padre de la criatura.

La historia empezó a rodarse en agosto en Alicante y ya ha pasado por Santiago y otras localizaciones gallegas. “La lluvia es muy importante en el guión”, asegura Martínez, que a las 14.00 horas ensaya con sus actores un encuentro en los pasillos… y “hasta ahí se puede contar”. La solución estará en las pantallas probablemente el año que viene, ya que el equipo cuenta con tener el primer montaje hacia finales de febrero.

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