"Esta es la asignatura pendiente" para ofrecer un servicio más completo y adaptado a las nuevas necesidades del consumidor, ha indicado el presidente de la Asociación de Detallistas del Mercado Central, José Carlos Gran.
"Tenemos muchas esperanza en vender bastante por Internet, aunque hay que reconocer que la venta de producto fresco va muy despacio, pero es una forma de vender sin el atosigamiento en el mostrador y sería el segundo escaparate, en este caso virtual, para que el consumidor pueda ver los productos".
En declaraciones a Europa Press, Gran ha explicado que de los nueve puestos de venta pendientes de licitar, uno se reservará para guardar los pedidos y enviarlos al domicilio. También se podrá utilizar a modo de consigna, donde los clientes pueden dejar su compra mientras se relajan en los puestos de restauración o disfrutan de las actividades complementarias de animación que se organizarán para todos los públicos, ha sugerido.
De los otros ocho puestos vacantes dos serán para la venta de carne, uno se dedicará a pollería, tres a pescadería y dos a verdulería, ha desglosado.
"Es una idea que hay que trabajarla porque hay ofrecimientos de plataformas para la venta online", ha expresado Gran para añadir que "se está en conversaciones con una plataforma local y el objetivo es que el reclamo sea el Mercado Central de Zaragoza como garantía de la procedencia de los productos".
Otras mejoras de la principal lonja de la ciudad es la accesibilidad del edificio modernista que cuenta con dos ascensores y una rampa, además de tener conexión al aparcamiento subterráneo de la avenida César Augusta.
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