El acalde de Toledo, Emiliano García-Page, comunicó hoy que el Ayuntamiento sustituirá 20 de los 41 autobuses urbanos actuales por vehículos "comprometidos con los principios de sostenibilidad" alimentados con gas en lugar de gasóleo, un combustible que no emite dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera. Así lo confirmó el primer edil en una rueda de prensa, acompañado del concejal de Movilidad, Seguridad Ciudadana y Protección Civil, Rafael Perezagua, y del concejal de Vivienda, Aurelio San Emeterio, en la que manifestó que éste es un ejemplo más del compromiso del Gobierno municipal con el medio ambiente que equipara a Toledo con ciudades como

García-Page explicó que la doble tarea de sustitución y reconversión se llevará a cabo a lo largo de los próximos tres años, no obstante, añadió, los 10 primeros autobuses estarán integrados en la flota a principios de 2009, tal como aseguró el alcalde al tomar posesión de su cargo.

Ahorro económico

Los gastos que el proyecto conlleva no acarrearán coste alguno a las arcas municipales, lo que significa que tampoco los ciudadanos tendrán compromiso económico con la iniciativa. Será la empresa Unauto la responsable de abonar el coste correspondiente a la renovación y a la diferencia entre gas y gasóleo, que también asumirá la entidad.

Según señaló el alcalde toledano, el proyecto alcanza una doble meta: la de mostrar un firme compromiso con la sensibilidad ecológica y medioambiental y la optimización de costes. En este sentido subrayó que el nuevo combustible supone un ahorro de aproximadamente el 7 por ciento en el gasto de carburante.

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