Cualquier día del año, las calles de Bilbao sufren en torno a una quincena de cortes de tráfico. Hoy mismo se han anunciado cortes en otras cuatro calles. Pero, ayer, en el Día sin Coches, la jornada destinada a cerrar el tráfico del centro para animar a la gente a dejar el coche, no se puede decir que Bilbao quedara blindado al tráfico.

Sólo se cortó una calle –Ledesma–, por la que circulan muy pocos vehículos al día. «Porque hay juegos para niños en esta calle, si no, ni habría notado que es una jornada sin coches», decía ayer un vecino. Poco más complicado lo puso Barakaldo.

Se cerraron tres calles (Los Fueros, Nafarroa y Bizkaia), y, de ellas, una es semipeatonal y la otra está en obras. En Getxo, los que cogieron el vehículo particular sí sufrieron la jornada, que llevaba por lema Aire limpio para todos. El Consistorio decidió cerrar el centro de Las Arenas y de Algorta. En total, 14 calles cerradas al tráfico. Muchos getxotarras se vieron obligados a caminar.

Límites a las emisiones tóxicas

El presidente del Bilbao Basket, Xabier Jon Davalillo, fue el encargado de leer el manifiesto del Día sin Coches. Y expuso los datos que, según recordó, hacen necesario reducir las emisiones tóxicas.

Cada vehículo vierte tres toneladas de CO2 al año –151,9 gramos de CO2 por kilómetro–,y en Bilbao, cada día, entran y salen unos 350.000. La UE, por ello, limitará a 120 gramos de CO2 por kilómetro para combatir el cambio climático.

CONSULTA AQUÍ MÁS NOTICIAS DE BILBAO