El principal amor que tenía en vida el célebre modisto alemán Karl Lagerfeld no era una persona, sino un animal: su gata Choupette. Heredera legal de la fortuna del diseñador (casi 180 millones de euros), la gata más rica del mundo tiene su propia cuenta de Instagram y en ella se están publicando fotos inéditas.

Según el Daily Mail, las últimas fotos que se están publicando en su perfil las tomó el propio modisto antes de morir, en febrero del año pasado. En las imágenes se ve a la gata en diferentes poses, jugando o descansando. 

Según Gerhard Steidl, amigo de Karl Lagerfeld, el diseñador le hacía unas 50 fotos al día a su amada mascota, con la que compartía casa en París.

Lagerfeld solía viajar con Choupette en su avión privado y la adornaba con collares de diamantes. 

Choupette, que hasta 2011 pertenecía al modelo francés Baptiste Giabiconi, tiene su propio representante. Desde 2012 ha posado en diferentes campañas de moda y ha participado en anuncios de televisión.