«Así no podemos vivir». De esta manera se expresa Francisco Pérez, un vecino de la calle Académico Sarazá, ubicada en el barrio de El Naranjo, al calificar la situación por la que pasan los residentes de aquella zona.

Fue poco antes del verano cuando Sadeco instaló seis contenedores de basura en esa calle, muy cerca de las ventanas de las viviendas. Esto provoca que durante gran parte del día entren en los pisos olores nauseabundos, así como todo tipo de insectos.

La situación durante el periodo estival ha sido incluso más complicada debido a las altas temperaturas. En el bloque más afectado viven 24 personas, algunas de ellas mayores con problemas respiratorios.

Francisco añade que los problemas se acrecientan por la noche debido al ruido que provocan los coches de Sadeco y que «nos impiden dormir».

Este vecino asegura que han pedido a Sadeco en multitud de ocasiones que solucione el problema, pero hasta el momento no han obtenido una respuesta.

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