El transporte público se ha puesto a punto ya para el inicio de un nuevo curso. Después de los meses de verano, y del descenso de usuarios que conlleva, los buses vuelven a incrementar su servicio, el metro estrena paradas reformadas y el AVE aumenta espectacularmente sus frecuencias.

Pero no todo son buenas noticias para el usuario. Los autobuses de barrio, minibuses que prestan servicio en zonas sin transporte público, reducirán sus frecuencias a última hora de la tarde, según confirmó a Transports Metropolitans de Barcelona (TMB), dado que «hay menos demanda». Es el caso, por ejemplo, de la línea 120 del Bus de Barri.

Los autobuses no verán menguado su intervalo de paso, que se mantendrá en 8 minutos para las líneas más usadas (33 líneas, el 66%).

Después del verano, la línea 44 se ha prolongado hasta el pabellón de Badalona y la línea 68 ya no transcurre íntegramente paralela a la 67, y pasa ahora por Pedralbes - Sarrià - Via Augusta. Y desde hoy, la línea 51 tiene parada en la calle Palamós y la 21 conecta con la estación de Renfe del Prat.

El metro estrena las remodeladas paradas de Navas (L1) y de Horta (L5), adaptadas; a parte de las reformadas de Liceu (L3), y Llucmajor y Alfons X (L4).

Más trenes a Galicia

Un nuevo tren Alvia cubrirá a diario el trayecto Barcelona-Vigo, lo que supone la reducción en más de dos horas del tiempo empleado. Otro Alvia, que hará el viaje en cuatro horas, cubrirá la ruta Barcelona-Pamplona desde hoy.

Respecto al AVE, hoy estrena 26 nuevas frecuencias, equiparando el servicio con el puente aéreo. El usuario tendrá un tren cada media hora o 20 minutos en horas punta, a primera hora de la mañana y a media tarde.